El aspecto, el olor, el sabor y la textura de las frutas y hortalizas son parámetros que el consumidor valora para determinar si un producto es de mayor o menor calidad.
El sector hortofrutícola realiza controles sobre las características organolépticas de los alimentos, para lo que cuantifica y establece criterios sobre los valores más adecuados de cada uno de estos parámetros.
Así, por ejemplo, es posible detectar la cantidad de azúcar que contienen frutas y verduras al medir los grados Brix con un refractómetro. El color de la fruta y verdura es otro elemento que ofrece datos sobre cuestiones como el grado de madurez, la calidad o sobre características del sabor.
La industria de la alimentación utiliza colorímetros y espectrofotómetros para realizar mediciones de color.
Este tipo de equipamiento es habitual encontrarlo en laboratorios de cooperativas, universidades y centros de investigación, como es el caso del Centro Tecnológico Tecnova, que, con sede en Almería, aporta valor a toda la industria auxiliar de la agricultura proporcionando servicios de I+D en todas las fases de la cadena producción y la comercialización, poniendo a punto continuamente nuevos métodos analíticos para evaluar compuestos de interés y ayudar a las empresas a potenciar su competitividad.
Medición del azúcar. Escala Brix
La industria de la alimentación utiliza habitualmente la escala Brix, que determina el contenido de sólidos solubles totales, para medir la cantidad de azúcares que contienen las frutas y verduras, por ello, con estas mediciones puede establecerse el momento óptimo de recolección, teniendo en cuenta el grado de maduración.
Medición de Brix con un refractómetro. Tecnova.
Los refractómetros son los instrumentos utilizados en este caso. Estos equipamientos cuantifican la refracción, es decir, el cambio de dirección de un rayo de luz -u otra radiación- que se produce al pasar oblicuamente de un medio a otro de distinta densidad.
Medición del color
El color puede ser medido mediante un análisis instrumental. Suele estar definido por un sistema tridimensional, representado en un plano por los diagramas cromáticos.
Medida del color con espectrofotómetro.
El sistema de coordenadas de color CIELab* está definido por tres coordenadas colorimétricas (L*, a* y b*). La coordenada L* expresa los valores referidos a claridad o luminosidad (de 0 a 100, donde 0 es negro y 100 blanco); la coordenada a* muestra los valores referidos al componente rojo-verde con valores positivos para el rojo y con valores negativos para el verde; finalmente, la coordenada b* expresa los valores que hacen referencia al componente amarillo-azul, de manera que el azul representa los valores negativos y el amarillo los positivos.
Medición del color mediante un colorímetro. Tecnova.
Por su parte, con el ΔΕ se determina la diferencia de color, es decir, la diferencia mínima entre dos colores. Para arrojar valores en este sentido se mide la distancia entre puntos en un espacio tridimensional, en concreto en el espacio de color CIELab*.
Laboratorios Eyco
Es conveniente calibrar periódicamente el equipamiento de medición. Laboratorios Eyco ofrece asesoramiento para la elaboración del plan de calibración de equipos ópticos.
Laboratorios Eyco, con amplia especialización en el área óptica, está acreditado por ENAC, de acuerdo a la Norma UNE-EN ISO/IEC 17025:2017, para realizar calibraciones de equipos ópticos y ensayos de las propiedades ópticas de los materiales.
Eyco trabaja con una amplia variedad de sectores, entre los que se encuentra la industria de la alimentación y sectores relacionados como el del envase y embalaje, la industria del plástico o el sector del agua.